Hay quien estará conforme con estas cifras. La realidad es bien diferente. El vino español vale muy poco. Eso dicen los números a pocos meses de la apertura de puertas a la plantación de viñedo. Futuro incierto que en La Rioja se encargan de frenar con la entrada en vigor de la Ley de la Calidad de la Uva y el Vino, que impedirá la plantación de viñedo cuyo fin sea elaborar vino de mesa o, dicho de otra forma, proteger la DOCa y permitir sólo viñas para uva amparada por el Consejo.
Cifras más pequeñas y entendibles. El 67% de esos 2.256 millones de litros vendidos salió de España a granel a un precio medio de 0.37 € según desvela Víctor de la Serna, editor de elmundovino. En el computo global, un litro de vino español se traduce en 1.11 € y una botella se vende al precio medio de 1.67 €. Con esas cifras, en Rioja sería imposible apostar por la calidad.
No hay que olvidar que la cosecha del 2013 se cerró con 52 millones de hectolitros, una barbaridad respecto a la anterior, que fue de 34,2. Lo triste es la necesidad de vender todo ese vino, necesidad que conlleva bajar precios.El precio por litro ha bajado un 22% respecto al año anterior. Para la cosecha del 2014 se prevé una transformación de 41,3 millones de hectolitro. Representa una bajada en los rendimientos del 22,3%. Posiblemente, bueno para los mercados. En Rioja, los precios del kilo de uva han subido y las operaciones, pagadas algunas, rondan los 0.80 €/kilo y se aproximan a los 0.90, según la calidad de la uva entregada.
Ahora bien, todas las monedas tienen su cara buena. España ha exportado más vino envasado que Francia e Italia, que bajan un 0.7% y un 0.2% respectivamente. España creció un 3.4%, hasta los 762 millones de hectolitros. Eso sigue, Francia e Italia venden más caro. En esos envasados se incluyen los espumosos. Italia ha crecido en sus ventas un 18,2%; Francia, un 4,5% y España, 3,2%, si bien España ha superado en ventas al champán en los países nórdicos, donde experimentaba un crecimiento del 28.24% entre enero y septiembre del pasado año
Cifras para todos los gustos, pero mientras el precio del vino baje, caerá el de la uva. Si los rendimientos son los mismos, el empobrecimiento será mayor.
Cifras más pequeñas y entendibles. El 67% de esos 2.256 millones de litros vendidos salió de España a granel a un precio medio de 0.37 € según desvela Víctor de la Serna, editor de elmundovino. En el computo global, un litro de vino español se traduce en 1.11 € y una botella se vende al precio medio de 1.67 €. Con esas cifras, en Rioja sería imposible apostar por la calidad.
No hay que olvidar que la cosecha del 2013 se cerró con 52 millones de hectolitros, una barbaridad respecto a la anterior, que fue de 34,2. Lo triste es la necesidad de vender todo ese vino, necesidad que conlleva bajar precios.El precio por litro ha bajado un 22% respecto al año anterior. Para la cosecha del 2014 se prevé una transformación de 41,3 millones de hectolitro. Representa una bajada en los rendimientos del 22,3%. Posiblemente, bueno para los mercados. En Rioja, los precios del kilo de uva han subido y las operaciones, pagadas algunas, rondan los 0.80 €/kilo y se aproximan a los 0.90, según la calidad de la uva entregada.
Ahora bien, todas las monedas tienen su cara buena. España ha exportado más vino envasado que Francia e Italia, que bajan un 0.7% y un 0.2% respectivamente. España creció un 3.4%, hasta los 762 millones de hectolitros. Eso sigue, Francia e Italia venden más caro. En esos envasados se incluyen los espumosos. Italia ha crecido en sus ventas un 18,2%; Francia, un 4,5% y España, 3,2%, si bien España ha superado en ventas al champán en los países nórdicos, donde experimentaba un crecimiento del 28.24% entre enero y septiembre del pasado año
Cifras para todos los gustos, pero mientras el precio del vino baje, caerá el de la uva. Si los rendimientos son los mismos, el empobrecimiento será mayor.
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